Hemos ejecutado con nuestra empresa de de aislamiento térmico en Colmenar Viejo, cerca de Guadalix, en Navalafuente una instalación de aislamiento térmico con lana mineral mediante insuflado en una cámara de aire aislamiento. Nuestra empresa de aislamiento térmico en Colmenar Viejo también ha soplado celulosa bajo cubierta, teniendo cuidado en soplar lana de roca alrededor del paso de la chimenea. El tipo de aislamiento usado varía en función de las necesidades, la tipología de la cavidad, el tipo de aplicación y las preferencias del cliente. Por ello para aislar térmicamente presentamos un abanico de soluciones con lana mineral blanca virgen, lana de roca, celulosa y corcho. Estos materiales tienen propiedades de aislamiento térmico y acústico. Nuestra empresa de aislamiento térmico en Colmenar Viejo, en Navalafuente por tanto ha hecho un servicio completo, contando el aislante térmico aplicado con las mejores características. Intentamos que nuestros servicios de aislamiento térmico cubran todas necesidades incluso solucionen problemas de humedades de condensación, puentes térmicos, eliminen hongos y contribuyan a aumentar el confort y bajar la factura de calefacción o aire acondicionado.
Nuestra empresa de aislamiento térmico en Colmenar Viejo explica con ayuda de la Inteligencia Artificial cual es efecto de inercia térmica de materiales biológicos, tales como la celulosa o el corcho:
El efecto de inercia térmica de los materiales biológicos, como la celulosa o el corcho, se refiere a la capacidad de estos materiales para retardar el intercambio de calor entre el interior y el exterior de un edificio, lo que contribuye a mantener una temperatura interior más estable y agradable. Este efecto es una característica importante en la construcción sostenible y en la eficiencia energética de los edificios. A continuación, se explican los aspectos clave de este efecto:
Capacidad de almacenamiento de calor:
Los materiales biológicos, como la celulosa y el corcho, tienen una alta capacidad para almacenar calor. Esto significa que pueden absorber y retener el calor durante un período prolongado cuando se calientan y liberarlo lentamente cuando se enfrían. Esta propiedad ayuda a mantener una temperatura interior más constante, ya que el material actúa como un «amortiguador térmico».
Regulación de temperaturas extremas:
Durante el día, cuando la temperatura exterior es alta, estos materiales biológicos absorben el exceso de calor y evitan que penetre en el interior del edificio, lo que ayuda a mantener una temperatura fresca y confortable en el interior. Durante la noche, cuando la temperatura exterior disminuye, liberan gradualmente el calor almacenado, lo que evita que el interior se enfríe demasiado rápido.
Reducción de la carga de calefacción y refrigeración:
Debido a su capacidad de regulación térmica, los materiales biológicos pueden reducir la necesidad de calefacción y refrigeración en un edificio. Esto puede conducir a un menor consumo de energía y, por lo tanto, a un ahorro de costos y una menor huella de carbono.
Contribución a la sostenibilidad:
El uso de materiales biológicos en la construcción, como la celulosa y el corcho, es sostenible ya que provienen de fuentes renovables.
En resumen, el efecto de inercia térmica de los materiales biológicos como la celulosa y el corcho es beneficioso para la eficiencia energética de los edificios y su capacidad para mantener temperaturas interiores confortables de manera natural. Esto los convierte en opciones atractivas en la construcción sostenible y en la búsqueda de edificios más respetuosos con el medio ambiente.
¿ Porqué según la Inteligencia Artificial no se debe insuflar celulosa en cavidades entre tabiques cerámicas ubicados en fachadas ?
Siguiendo las recomendaciones de nuestra empresa de aislamiento térmico en Colmenar Viejo, no se debe insuflar celulosa en cavidades de fachadas cerámicas por varias razones importantes:
Riesgo de humedad:
La celulosa es un material que puede absorber y retener la humedad. Cuando se coloca en una cavidad de fachada cerámica, puede absorber la humedad del exterior o del interior del edificio. Esto puede provocar problemas de humedad en la estructura de la fachada, lo que a su vez puede conducir a daños en la cerámica y al deterioro general de la fachada. En ese sentido el código de edificación CTE DB HS lo deja claro. No introducir materiales absorbentes o hidrófilos «amigos del agua». en cámaras de ventilación.
Dificultades de ventilación:
La celulosa tiende a reducir la capacidad de ventilación de la cavidad de la fachada. Una ventilación adecuada es esencial para permitir que el aire circule y elimine la humedad atrapada. La reducción de la ventilación puede agravar aún más el problema de la humedad.
Posible degradación:
La celulosa puede degradarse con el tiempo debido a la humedad, la exposición a la intemperie y la presión. Esto puede hacer que pierda sus propiedades de aislamiento y, en última instancia, comprometer la eficacia del aislamiento en la fachada.
Riesgo de fuego:
La celulosa tiene propiedades ignífugas pero no deja de ser un material inflamable, y si se instala en una cavidad de fachada cerámica, puede representar un riesgo de incendio si se expone a una fuente de calor, por ejemplo si se insufla en cámaras de ventilación, próximas a una chimenea.
En lugar de la celulosa, se suelen utilizar otros materiales de aislamiento más adecuados para las fachadas cerámicas, como lana mineral, lana de roca o corcho, que son menos propensos a absorber humedad y tienen propiedades de aislamiento más estables en condiciones de construcción típicas.